Una de las mayores preocupaciones en el embarazo es conocer el estado del bebé, saber si crece y se forma de manera correcta. Para ello, un control prenatal es indispensable, un seguimiento en el que el médico esté pendiente de la salud de la madre y del bebé. Las ecografías son exámenes radiológicos totalmente seguros que pueden realizarse incluso desde etapas tempranas de la gestación. De esta manera es posible predecir, conocer y anticipar la evolución del embrión y del feto hasta su nacimiento. En esta ocasión nos enfocaremos en la importancia de realizarse exámenes de ultrasonido o ecografías durante la gestación.

¿Qué es una ecografía?

Se refiere a un estudio no invasivo y seguro que consiste en la utilización de ondas de sonido que “rebotan” en el interior del cuerpo, de forma que se producen imágenes de los órganos y estructuras. Estas imágenes dan una idea importante a los médicos para diagnosticar y tratar enfermedades, pero también son de enorme utilidad para verificar el estado de salud y desarrollo del feto.

En este caso, la ecografía puede realizarse de forma externa, aplicando un dispositivo sobre el vientre, o de forma interna, introduciendo el dispositivo dentro de la vagina. Esto no afecta en absoluto al feto, y es posible monitorear el desarrollo del bebé y decubrir si presenta algún tipo de anomalías o enfermedades, que incluso pueden ser tratables con un diagnóstico precoz.

¿Por qué es importante la ecografía durante la gestación?

Desde la concepción, el embrión pasa por diversas etapas de forma muy rápida y va cambiando día a día, semana a semana, mes tras mes. Es por ello que, de forma periódica, el ginecobstetra solicitará este tipo de estudio que muestra imágenes nítidas del feto que podrá observar e interpretar, así como realizar las mediciones correspondientes. Existen estándares que indican qué debe mostrarse en la ecografía que determine un desarrollo sano y normal.

Para ello, la ecografía ofrece información muy valiosa sobre cada etapa del desarrollo del futuro bebé, su tamaño, formación de órganos, su latido cardiaco…

¿Cómo se realiza una ecografía del embarazo?

Como mencionamos antes, el ultrasonido o ecografía es una prueba totalmente segura y fiable, tanto para el bebé como para la madre. Es posible que el médico realice algunas indicaciones previas a la prueba, por ejemplo, que la paciente beba suficiente agua para que llegue con la vejiga llena, con el fin de obtener una mejor imagen. Después de colocada la bata, procederá a realizar el examen, aplicando gel conductor sobre el vientre y la pelvis.

Utilizando un dispositivo o sonda manual, el médico procederá a deslizarlo sobre la superficie para explorar y conocer cómo está el bebé y también la salud de la madre. Quizá la única molestia que se sienta es la frialdad del gel o que se presiona ligeramente la vejiga, pero nada más. En cuanto a la ecografía transvaginal (alrededor de las 6 semanas de gestación) se realiza para detectar la presencia del embrión de manera más nítida y precisa, dado su tamaño tan pequeño.

¿Cada cuánto es necesario realizar una ecografía en el embarazo?

Por lo general, la primera ecografía en la gestación se realiza entre la semana 11 y 13, y suele ser transvaginal. Además de la detección primera del embrión, también es importante para saber si hay más de uno o si hubiera algún tipo de anomalía, como embarazo ectópico o que se encuentre en el útero. Se mide la longitud de la cabeza, el final de la columna, la edad gestacional, el pliegue nucal (importante en el caso de posibles anomalías cromosómicas o del corazón, por ejemplo, síndrome de Down).

El ginecobstetra determinará el número de ecografías a realizarse durante el embarazo, pero al menos deben de ser tres, siendo la segunda alrededor de la semana 20 de gestación. Esta ecografía es abdominal y en ella se realiza el examen morfológico completo con todas las medidas, desde cabeza hasta extremidades. Se verifica que esté creciendo acorde a la edad gestacional e, incluso, es posible conocer el sexo del bebé.

La tercera ecografía gestacional recomendable es entre las semanas 33 y 35, nuevamente para verificar el crecimiento del bebé y conocer si hay algún problema que no se haya detectado antes. Pero también se revisa la placenta y la cantidad del líquido amniótico, además de posibles problemas que existan porque el bebé ya casi está a término y hay poco espacio, lo que en ocasiones puede derivar en un cordón umbilical que esté rodeando al cuello.

Centro Médico Medcare: realizamos ecografías durante la gestación

En el Centro Médico Medcare contamos con ginecólogos y obstetras cualificados para monitorear tu embarazo de principio a término, dando seguimiento puntual en cada etapa. Y como hemos visto, es muy importante realizar ecografías periódicas de tu gestación para garantizar que tu bebé esté sano y que tengas apoyo profesional todo el tiempo.

Puedes solicitar una cita desde nuestra web o llámanos al 960 065 693, estamos en Av. de Francia, 47, Valencia.